Aunque algunas personas tienen la idea de que la ropa interior no importa durante el acto sexual, la realidad es que se ha convertido en una herramienta básica para aumentar la pasión durante la intimidad.
Según expertxs en erotismo, las prendas provocativas o lencería sexy resultan beneficiosas tanto para las mujeres que las usan (al aumentar su autoestima y confianza), como para sus parejas (al incrementar su deseo sexual).
Una de las ventajas de usar lencería sexy es que este tipo de prendas resaltan las mejores cualidades del cuerpo y ocultan aspectos que generan inseguridad. Esto puede tener un impacto positivo en la mujer, lo que genera una mayor experiencia sexual.
Otra ventaja es que la lencería sexy ayuda a mantener la chispa en la relación. Sorprender a la pareja con un conjunto provocador hará que se despierte la pasión y le dará un toque más sensual al ambiente íntimo.
Ante la rutina o falta de deseo sexual, este tipo de prendas íntimas podría reavivar la llama, rompiendo con la monotonía.
Consideraciones finales
La lencería sexy durante las relaciones sexuales puede funcionar casi como un juguete sexual más, ya que fomenta una interacción distinta en la pareja, ayuda a mantener la chispa y le añade diversión a los encuentros.