Seguramente has utilizado el término “relación homosexual” para describir cualquier relación entre personas del mismo sexo o género, pero en esta nota nuestra intención es explicarte por qué ya no es recomendable su uso.
Homosexualidad
Se define como la atracción romántica o sexual entre miembros del mismo sexo o género.
Ahora bien, ¿qué son las relaciones homosexuales?
De manera general, el término se refiere a las relaciones (afectivas o sexuales) que mantienen dos personas del mismo sexo o género y, por tanto, puede aplicarse tanto a parejas de hombres como de mujeres (e incluso hay quienes incluyen también relaciones con personas trans).
Entonces, ¿por qué ya no es recomendable el uso de este término?
Empecemos explicando que ese término tiene mucho tiempo de emplearse y sirvió, en algún punto, para denostar a las relaciones entre personas del mismo sexo (fuesen dos hombres o dos mujeres).
Sin embargo, tomando en cuenta que el paraguas de la diversidad es muy amplio, debemos de entender que no todas las relaciones LGBT+ se dan entre personas cis.
Peor aún, recordemos que una de las identidades más invisibilizadas es la bisexualidad y, en este sentido, cuando decimos “relación homosexual” para describir a la relación que establecen dos hombres (o dos mujeres) estamos negando la posibilidad de que alguien de ahí sea bisexual, lo que refuerza todavía más el estigma y la discriminación hacia esta identidad (y lo mismo aplica para cualquier otra plurisexualidad).
Consideraciones finales
Las relaciones LGBT+ no solamente se dan entre homosexuales, pues existen muchas identidades dentro del paraguas de la diversidad y, por ende, algunos colectivos plurisexuales sugieren que se deje de emplear el término “relación homosexual” ya que se considera una forma de bifobia y refuerza la invisibilización a identidades que ya de por sí sufren doble discriminación (tanto por heterosexuales como homosexuales).
SABER MÁS:
Te recomendamos este video que ahonda en el tema de la bifobia.