Es común que las personas trans que desean recurrir a tratamientos de hormonización tengan dudas al respecto, y por esta razón te detallamos aquí algunas ventajas y desventajas de estos procedimientos.
Se le llama hormonización al proceso médico que busca ajustar los niveles hormonales de una persona para que estén acordes con su identidad autopercibida de género.
Generalmente, personas trans (hombres trans y mujeres trans) y no binarias suelen experimentar alguna disonancia entre su identidad autopercibida de género y su sexo asignado al nacer; por lo que los tratamientos de hormonización les ayudan a combatir esta disonancia al lograr una mejor congruencia entre su identidad y su físico.
Ventajas de los tratamientos de hormonización para personas trans
La hormonización puede proporcionar una sensación de alivio y bienestar mental a personas trans ya que les permite lograr cambios físicos acordes a su identidad de género autopercibida.
La hormonización reduce los problemas relacionados con la disforia de género, como la angustia emocional, lo cual mejora la salud mental.
Desventajas de los tratamientos de hormonización para personas trans
Como efectos secundarios, hay personas trans que pueden padecer cambios en la presión arterial, niveles de colesterol, disminución de la fertilidad y otras afecciones.
Varios de los cambios que surgen tras la hormonización son irreversibles. Esto puede generar inseguridad en las personas, ya que se debe ser consciente de que son decisiones que impactarán en la vida.
Consideraciones finales
La hormonización ayuda a alinear el físico con la identidad autopercibida de género, ayudando a la disforia de género y salud mental de personas trans, pero son procesos que también conllevan riesgos, por lo que es importante estar consciente tanto de lo positivo como de lo negativo y, por supuesto, deben ser supervisados por expertxs en salud.