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"Las chicas están bien", película llena de fortaleza femenina

La idea original de la película nació de una experiencia "reveladora y revivificante" de la directora

Itsaso Arana siempre había escrito y dirigido junto a sus parejas masculinas y cuando se le planteó la posibilidad de hacer una película por sí sola, tuvo que luchar contra su propios prejuicios. Filmaffinity
Por:  Diverso

Las chicas están bien, película que marca el debut como directora de la actriz y guionista Itsaso Arana, está llena de fortaleza femenina y compite por el Globo de Cristal en el Festival de Karlovy Vary, el cual concluye este 9 de julio.

La producción, estrenada el sábado en el festival checo, trata sobre una escritora y cuatro actrices que se van durante una semana de verano a una casa de pueblo para ensayar una obra de teatro; y tiene como curiosidad el hecho de que las actrices conservan sus nombres dentro de la película: Bárbara Lennie, Irene Escolar, Itsaso Arana, Itziar Manero y Helena Ezquerro.

"Es que es un cuento muy real", contó Itsaso Arana en entrevista a EFE tras el estreno del filme, rodado en solo quince días y que compite con otras diez películas por el Globo de Cristal.

A través de conversaciones, carcajadas y llantos, las cinco amigas, con una complicidad real, invitan al espectador a unirse a sus dilemas y a dialogar sobre temas vitales complejos, pero "sin ponerse solemnes".

Versando entre humor, amistad y conversaciones sobre el amor, el deseo, la soledad o la muerte la película navega entre elementos del presente y del pasado para hacer una relectura de los cuentos: hay música de Bach, vestidos victorianos a medio poner, una verbena de pueblo, un príncipe despistado, un guisante que se esconde bajo el colchón y hasta un sapo.

El estreno fue acogido por el público entre aplausos y vítores y terminó con un abrazo de las cinco "chicas", que vieron la película sentadas entre el público.

"A veces, la ficción e incluso los cuentos nos pueden salvar si nos dejamos vivir nuestras propias fantasías con libertad. No bajo una mirada masculina, sino mirándonos entre nosotras", declaró Itsaso Arana.

La cineasta revela que escribió el guión expresamente para cada una de las actrices. Por ejemplo, la orfandad de Ezquerro y Manero, las dos más jóvenes, no fue inventada. Ambas actrices explican a las demás en la película, en una cena bajo la luz de la luna, cómo es el sentimiento de perder a una madre y tratan el tema con una sensibilidad que se advierte auténtica.

"Para mí, la 'peli' ha sido muy sanadora. Yo lo que cuento es real", asegura Manero, y añade que, para ella, "fue mágico contar algo así".

Helena Ezquerro, por su parte, dice que lo más importante para ella fue aportar su experiencia personal a la película, "ponerla al servicio de algo muy bonito, entendiendo cómo la directora iba a tratar el tema".

Así nació esta película sobre la fortaleza femenina

La película tiene una duración de 85 minutos. Filmaffinity

La idea original de la película nació de una experiencia "reveladora y revivificante" de la directora.

"Estábamos todas las mujeres de mi familia alrededor de la cama de mi padre mientras moría y, de alguna manera, le acompañamos en ese tránsito. (...) Cinco años más tarde estábamos rodando la película", relata.

Las chicas están bien, resume la directora, es "una película sobre la fragilidad, sobre una fuerza que nace de la fragilidad". Además, cabe destacar que la historia sobre la fortaleza femenina estuvo acompañada también por un rodaje en el que no sólo el elenco sino también el equipo técnico era casi exclusivamente femenino.

Itsaso Arana se preocupó de que "hubiera un ambiente de ternura, relajación y confianza" en el rodaje que, sin duda, se refleja en la película.

"La directora de fotografía era mujer, la directora de sonido era mujer, la de vestuario y arte también... ¡Hasta la foquista!", recuerda Itziar Manero.

Sin embargo, este no ha sido un proyecto fácil para su creadora. Itsaso Arana siempre había escrito y dirigido junto a sus parejas masculinas y cuando se le planteó la posibilidad de hacer una película por sí sola, tuvo que luchar contra su propios prejuicios.

"Creo que tenía que ver con la mirada patriarcal que tenía sobre mí misma. Quería crear algo mío, yo sola, mejor o peor, pero mío", aseguró.

Al fin, justo hace un año, pudo empezar a rodar este "cuento de verano" que se cierra de un modo poético con el Preludio número 1 en do mayor de Bach.

Ese preludio de Bach es una obra armónica con una melodía que se construye sobre cinco voces que se van alterando pero se mantienen durante toda la composición, y quizá esa sea la esencia de esta historia.

Cinco voces que fluctúan, a veces en tonos mayores; más felices, y menores; más melancólicos, pero, al fin y al cabo, esa mezcla constituye la identidad de la película y la naturaleza de la vida.

SABER MÁS:

Las chicas están bien llegará a los cines de España el próximo 25 de agosto y esperamos que este mismo año la podamos disfrutar aquí en México ya sea en cines o en alguna plataforma de streaming.

Con información de agencia EFE

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