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¡Rumba, samba, mambo! Locomía, el grupo transgresor que bailaba con abanicos y desapareció en la cúspide de su carrera

El grupo español integrado inicialmente por diseñadores de moda alcanzó la fama gracias a sus pegajoso electropop que, además, acompañaron con su singular forma de bailar con abanicos 

La agrupación española Locomía alcanzó la fama a principios de los años 90's con su singular forma de vestir y bailar. ESPECIAL/

Con el anuncio de que se prepara una película de Locomía (o Loco Mía), recordamos los inicios de esta exitosa agrupación española conformada inicialmente por Xavier y Luis Font, Manuel Arjona Velasco y Gard Passchier en 1984, y la cual nos puso a bailar con su peculiar electropop.

El grupo, mismo que comenzó su carrera artística arriba de los escenarios con la intención meramente de dar a conocer sus diseños, pronto tomó fuerza y notoriedad por sus extravagantes atuendos y su singular manera de bailar con grandes abanicos que rápidamente se convirtieron en su sello personal dentro de las boy bands de la época.

En 1989 lanzaron su primer álbum de estudio, Taiyo, y lograron posicionarse en los primeros lugares de las listas de popularidad con su sencillo “Locomía”, éxito que fue precedido con temas como “Loco Vox”, “Rumba, samba, mambo” y “Niña”, pero, ¿qué fue de este cuarteto español por el que han desfilado más de 15 vocalistas?

Abanicos y mucha moda

De acuerdo con lo compartido por Xavier Font, uno de los vocalistas y fundadores de Locomía, llegó a la ciudad de Ibiza en 1983 luego de que darse cuenta de que sus diseños atrevidos y provocadores no triunfarían en Barcelona. Para entonces, la famosa isla era el epicentro de la modernidad occidental, por lo que las singulares hombreras, abanicos y zapatos puntiagudos con lo que Font comenzó a pasear sin tapujos en la comunidad de San Antonio pronto se volvieron en la sensación del lugar.

Sin escatimar, la discoteca KU pronto le echó el ojo a Font, y este, a su vez, llevó a varios de sus amigos a unirse al proyecto para bailar en el sitio, entre ellos Gard Passchier. Su popularidad iba cada vez más en ascenso.

"Vivíamos los dieciséis, todos juntos, en una masía en el campo. Éramos como una comuna 'hippie' pero sin ser 'hippies'", señaló Font en una ocasión.

No obstante, los grandes abanicos son hasta hoy su más grande distintivo, y Font no ha tenido demora en narrar como fue que nació la Locura Mía. "A Gard le preguntaron por qué llevábamos esos abanicos tan grandes y él quiso responder que era 'una locura mía', pero como no dominaba la gramática española, dijo que era una 'locomía'. A todos nos encantó el nombre", recordó.

El resto es historia. Tras algunas modificaciones de integrantes, en 1989 grabaron su primer LP, Taiyo,  y de ahí devino la locura de la famosa agrupación con cuatro vocalistas guapos, y aunque amados por las niñas, homosexuales.

Xavier compartió que su entonces mánager, José Luis Gil, los había obligado básicamente a esconder su homosexualidad. "La ambigüedad es comercial; lo definido, sea lo que fuere, limita y reduce el público", decía, aunque, en retrospectiva, una de las claves del éxito de la agrupación había sido su singular forma de vestir y su amaneramiento.

Se desintegra la agrupación

La fama de Locomía iba viento en popa, pero en 1991, las diferencias entre los entonces integrantes de la agrupación, Francesc Picas, Manuel Arjona, Carlos Armas y Santos Blancos, salieron a relucir contra su mánager, quien no dudó en pelear legalmente la marca Locomía (Loco mía), razón por la cual se vieron obligados a separarse definitivamente del nombres hasta 1993, año en que la disputa se resolvió a favor de Xavier Font.

Aunque la popularidad de la agrupación ya no continuó en auge como se esperaba, Locomía ha continuado lanzando algunos sencillos y presentándose con sus distintivos atuendos y abanicos que marcaron a toda una generación.

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