Raúl Araiza, quien es uno de los actores y conductores más reconocidos en la televisión mexicana, estuvo casado durante 24 años con la empresaria Fernanda Rodríguez, de quien se divorció en 2020. No obstante, juntos procrearon a sus dos únicas hijas: Roberta y Camila, quien se declaró pansexual.
Camila, quien ahora tiene 26 y que a su vez es nieta de la primera actriz mexicana Norma Herrera confirmó además ser demisexual, y confirmó su pertenencia a la comunidad LGBT+ tras asistir de la mano de su novia, la modelo Camila Solorzano, a la marcha del orgullo en junio de 2022.
- Te puede interesar: ¿Intersexual o hermafrodita? ¡Checa cuál es el término correcto y por qué!
Apoyo total
Tras confesarle a sus padres sobre su orientación sexual, Raúl no dudó en externar en sus redes social el apoyo incondicional que tenía para ella frente a todo prejuicio social.
De la misma manera, el conductor señaló que esta confesión pública de su hija no le tomó para nada por sorpresa, y presumió tener una excelente relación con ella.
“Lo hizo en un día muy importante, yo no se si lo tenía preparado o no, simplemente fue feliz. Nos amamos profundamente, la admiro por ser valiente. Camila siempre ha sido muy valiente en su forma de pensar, somos muy distintos en cómo vemos la vida, pero el chiste es liberar y soltar", añadió para los medios de comunicación.
Un proceso de reconocimiento
Camila Araiza aseguró haber comprendido que más allá del género, del nombre y del cuerpo con el que biológicamente nacemos, el amor es amor y ella, por su parte, se ha terminado enamorado de una “alma hermosa” como la de la modelo Camila Solórzano, con quien tiene una relación amorosa.
“Lo que sucedió es que tuve un encuentro de identidad conmigo misma, en lo emocional y en lo psicológico. Cuando salí a decir lo que soy, lo hice con mucha valentía, fortaleza, resiliencia y… me salvó la vida”, mencionó la hija de Raúl Araiza para la revista Quién.
De la misma manera, la también modelo aseguró que para poder evolucionar tuvo que aprender a no necesitar la aprobación de nadie para poder decir por ella misma quién era, lo que derivó en un proceso para aprender a amarse frente a toda la presión que sentía sobre los medios de comunicación.
“Mi sexualidad se confirma hasta este punto de mi vida, a mis 25 años. No es que me guste el físico de alguien sino su alma, su energía. Para mí, todos hemos sido todos, y no tiene nada que ver el traje que traigas puesto, aunque, a través de éste pude encontrar totalmente mi verdad y, finalmente opté por quitármelo. Hoy creo en lo expansivo, porque yo puedo amar a cualquier persona, porque aquella línea de vida que la sociedad nos ha impuesto sólo nos limita y es cuando debemos preguntarnos ‘¿en qué momento estamos haciendo lo que nos hace feliz?’", agregó para la revista.
Actualmente Camila continua en una relación con Solorzano, de quien, asegura encontrarse profundamente enamorada:
“Estoy enamoradísima de Cam, iniciamos siendo amigas y después nos dimos cuenta de nuestras similitudes, no sólo en los nombres sino en el arte que compartimos, a que teníamos dolores iguales; además, somos Sagitario. Hoy nuestros papás nos dicen que nunca nos habían visto tan felices y aunque hay subidas y bajadas, caminamos juntas y eso es lo que importa”, apuntó.