Este miércoles la Cámara de Diputados de Chile rechazó la acusación constitucional impulsada por diputados ultraconservadores contra el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, abiertamente homosexual, por su gestión y sus políticas de género.
Con 78 votos en contra, 69 a favor y ninguna abstención, la cámara rechazó la admisibilidad de la iniciativa, misma que generó duras críticas por parte del Gobierno.
"Mi llamado es a cuidar el trato en el mundo político, a respetarnos más allá de las diferencias, a no convertir las justas diferencias en ataques personales", defendió el ministro tras la votación.
¿Qué fue lo que sucedió?
La acusación achacaba al ministro mala gestión y vulneraciones a los derechos humanos de niños por permitir programas sobre educación sexual y educación no sexista.
Es una de las pocas veces en la legislatura que la oposición no vota en bloque, ya que los diputados del liberal Evópoli se desmarcaron de sus socios y votaron en contra de la acusación, generando tensiones en la bancada de la derecha.
Por su parte, el diputado Francisco Undurraga, de Evópoli, aseguró que la denuncia contra el ministro era "débil, difusa y sin los requisitos que pide la Constitución", y sostuvo que desde hace un lustro la acusación constitucional se usa como una manera de "revanchismo político" contra el Gobierno.
La acusación constitucional contra el ministro llegó con el informe negativo de la Comisión Revisora de la denuncia en la Cámara de Diputados, que recomendó este martes parar el proceso.
La denuncia contra el ministro de Educación generó duras críticas por parte de los partidos de la coalición del Gobierno, que achacaron a la oposición ir en contra de Ávila por su orientación sexual.
El portavoz del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, que asistió este miércoles al Congreso Nacional, valoró que "se impulsó la cordura y el respecto a la diversidad y la dignidad humana" y tildó de "arremetida homofóbica sin precedentes" la iniciativa contra el ministro de Educación.
"Hoy nos jugábamos buena parte de las tres décadas de lucha del movimiento LGBTIQ+, la acusación se habría convertido en lo peor y más grave retroceso en la lucha por la igualdad que emprendimos en 1991 y hasta la fecha", dijo Rolando Jiménez.
Con el proceso contra Ávila, los ministros del presidente Gabriel Boric acumulan cuatro acusaciones constitucionales, pero ninguna se ha aprobado. En el segundo Gobierno del conservador Sebastián Piñera (2018-2022), y coincidiendo con las protestas de 2019, se aceleró la presentación de acusaciones constitucionales, con diez procesos contra sus ministros en una sola legislatura.
SABER MÁS:
Una acusación constitucional es un procedimiento contemplado en la ley que faculta a los diputados a iniciar un juicio político contra una autoridad y puede desembocar en la destitución o la inhabilitación para ejercer cargos públicos del acusado durante cinco años.
Con información de agencia EFE