Este martes, el primer ministro de Hungría, el ultranacionalista Viktor Orbán, insistió en que su país no aceptará cuotas de refugiados y advirtió que únicamente se podrá consensuar una política migratoria en la Unión Europea (UE) si se permite entrar sólo a quienes tengan permiso.
"En Hungría no habrá cuota de inmigrantes, ni gueto de inmigrantes", afirmó el primer ministro durante su discurso en la apertura de la sesión del Parlamento de otoño.
Viktor Orbán, opositor de la inmigración, afirmó que la Unión Europea solo logrará resolver los retos relacionados con el tema "si Bruselas entiende y acepta que sólo se deberían dejar entrar en el territorio de la UE a aquellos que cuentan con un permiso previo".
En relación al acuerdo sobre migración de la UE, que propone un mecanismo para equilibrar el peso migratorio entre los países miembros y que acepta como una causa para emigrar el pertenecer a la población LGBT+ (para quienes huyen de territorios donde, a causa de su identidad u orientación, son discriminados, privados de derechos o corren peligro), Orbán enfatizó que su Gobierno rechaza esas cuotas solidarias y apuesta por reforzar las fronteras con vallas y guardias.
Hungría se opone a las “cuotas”
Hungría levantó en 2015 vallas en sus fronteras del sur con Serbia para detener la inmigración y ha aprobado una serie de legislaciones que hacen más difícil solicitar asilo en el país, algo por lo que ha sido criticado por la UE; además de que recordemos que es un país en el cual la comunidad LGBT+ no cuenta con muchos derechos. Por ejemplo, en mayo de este año se debatía una enmienda que alentaba a la población a delatar a cualquier persona por homosexualidad; la cual al final fue retirada, por la presión que la UE y activistas ejercieron.
Con información de la agencia EFE
JN