Este miércoles la organización AI acusó al Gobierno iraquí de vigilar “contenidos indecentes” en las redes sociales. En un comunicado emitido por Aya Majzoub, directora adjunta del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de AI, señaló lo preocupante de que a unos meses de que entrara en vigor el gobierno de Al Sudani haya iniciado una campaña para reprimir “contenidos indecentes” y que se esté procesando a personas por publicar videos en los que bailan o hacen bromas.
Majzoub recordó que "el primer ministro se comprometió públicamente en al menos dos ocasiones a proteger las libertades públicas y los derechos humanos". Sin embargo, los nuevos mecanismos de control "han llevado a los tribunales a condenar a prisión a seis personas por ejercer su derecho a la libertad de expresión" en redes sociales.
Antecedentes
En enero de 2023, el Ministerio del Interior de Irak creó un comité para vigilar lo que considera contenido "indecente" en las redes sociales y remitir a las personas para su procesamiento en virtud de los artículos del Código Penal que tipifican como delito los actos de "indecencia pública".
También creó "Balgh" ("denuncia" en árabe), una plataforma en la que la gente puede denunciar contenidos de redes sociales que "atenten contra la moral pública, contengan mensajes negativos e indecentes y socaven la estabilidad social".
Según AI, la comisión ha remitido al menos 16 casos para su investigación penal por parte de las autoridades judiciales y a partir de denuncias en la plataforma "Balgh".
"Los tribunales penales ya han condenado a prisión a seis personas por sus publicaciones en las redes sociales y están investigando a otras ocho (...) por crear contenidos relacionados con la música y la comedia", indicó la organización en su nota.
Menoscabo de la libertad de expresión
AI instó al gobierno a garantizar avances significativos en el estancado proceso de rendición de cuentas por la represión de las protestas en 2019 y a dar prioridad a cuestiones como el acceso de las personas desplazadas a medios de subsistencia, la violencia de género y las condenas a muerte dictadas tras juicios injustos.
Irak es un país de mayoría musulmana chií, una rama muy conservadora del islam, donde se considera inapropiado utilizar el lenguaje vulgar en público o que una chica cuelgue en redes sociales un vídeo en el que aparece bailando, algo que incluso se podría considerar "libertinaje" en el país árabe.
Con información de agencia EFE