El piloto británico Lewis Hamilton arremetió esta semana en contra de las nuevas medidas tomadas con respecto a la población LGBT+ en el estado de Florido, Estados Unidos aprobadas por la legislatura del estado, posteriormente crítico la polémica ley “No digas gay” haciendo referencia a la opresión existente en Arabia saudí con respecto a la diversidad sexual.
El siete veces campeón de la Formula Uno comentó que no es correcto y que apoya a la comunidad:
"No está para nada bien. Apoyo a aquellos que están acá en la comunidad. Espero que puedan continuar firmes y resistir. Llevaré el arcoíris en mi casco. Esto no es distinto a cuando estábamos en Arabia Saudí".
Lewis Hamilton, es el único piloto de Fórmula 1 que pertenece a la raza negra, debido a su posición como minoría y disidencia social utiliza su figura mediática para pronunciarse y alzar la voz con respecto a problemas relacionados a la justicia, los derechos humanos, racismo y comunidad LGBT+.
El británico de 38 años se expresa abiertamente mientras compite en países con cuestionables historiales de derechos humanos (incluyendo Arabia Saudí) o cuando acontece un problema en el que él sienta que su voz pueda brindar ayuda.
Se pronuncia tres días antes de la primera de tres carreras que la F1 escenificará este año Estados Unidos, algo que no tiene precedentes y que es una muestra del creciente interés de los estadounidenses por el campeonato. Las próximas citas serán en Austin, Texas, y en Las Vegas.
Hamilton suele correr llevando la bandera arcoíris en su casco, específicamente si la Formula 1 lleva a cabo sus carreras en países con leyes restrictivas. El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, promulgó a finales de marzo como ley estatal el proyecto de ley sobre los derechos de los padres en la educación. La legislación prohíbe que los maestros de escuelas públicas hablar sobre la identidad de género y la orientación sexual.
Pese a que Hamilton está en contra, el veterano piloto de Mercedes no ha mencionado si la F1 debería evitar en Florida, debido a sus políticas sociales.
"No es la gente de Miami que está tomando estas decisiones, es la gente en su gobierno, y ese es el problema". Pienso, y espero, lo que puedo hacer (ya que el evento se realizará aquí esté o yo no esté) pero lo menos que puedo hacer es continuar brindando mi apoyo, y estar aquí llevando eso en mi casco, espero que eso hable bien sobre el hecho."
Con información de AP.