La urofilia, mejor conocida como lluvia dorada, forma parte de los fetiches sexuales y se refiere a la excitación que siente una persona al orinar o ser orinada durante el acto sexual.
Aunque puede parecer una práctica desagradable para algunas personas, hay a quienes les excita esta idea y debes saber que es un fetiche tan válido como cualquier otro, el cual debe practicarse siempre en un entorno consensuado.
¿Cómo se practica la lluvia dorada?
Algunas parejas disfrutan de realizarla durante el acto sexual, orinando sobre la otra persona para que esta haga contacto con alguna parte específica del cuerpo, mientras que otras lo realizan en espacios como la ducha o bañera a fin de que su limpieza pueda ser más sencilla.
Consideraciones
La lluvia dorada no es para todas las personas y, como cualquier otro fetiche, su práctica es normal y debe ser consensuada.
Además del consentimiento, el respeto y comunicación garantizarán una experiencia segura y placentera.
Curiosidad
El origen de esta práctica sexual viene de la mitología griega ya que, según se dice, Zeus, para seducir a Dánae, que estaba encerrada en una jaula inaccesible, se transformó en “lluvia dorada” y la dejó embarazada.