Para la Real Academia Española (RAE), la disforia implica un estado de ánimo de tristeza, ansiedad o irritabilidad. Sin embargo, en esta nota nos centraremos, todavía más, en la llamada “disforia de género”, la cual se asocia a la incomodidad que sufre una persona cuando su sexo asignado al nacer no coincide con su sexo autopercibido.
Disforia de género
Anteriormente se consideraba como un trastorno, pero ahora se sabe que es producto de una discordancia entre cómo me percibo y cómo me veo, y puede ocasionar ansiedad, depresión y otras afectaciones.
Por lo general se asocia con la transexualidad, ya que la mayoría de las personas que se encuentran dentro del paraguas trans no suelen identificarse con el género asignado al nacer. Sin embargo, también las personas no binarias, de género disconforme, agénero, demigénero o de género expansivo pueden sentir disforia de género.
Tipos de disforias
Como puedes notar en esta pequeña imagen del colectivo VidaTrans, existen tres tipos de disforia, los cuales te explicamos a continuación.
- Disforia social. Se refiere a la incomodidad a la hora de presentarte socialmente con tu género asignado al nacer; por ejemplo, en una entrevista de trabajo o fiesta.
- Disforia de cuerpo. Incomodidad con el cuerpo por ser del género contrario al autopercibido. Por ejemplo, al nacer con cuerpo masculino, pero identificarse con el género femenino.
- Disforia de mente. Incomodidad con la mente y emociones que no se alineen con tu género. Por ejemplo, la puede sufrir un hombre trans que, aunque se halle en transición, no se sienta “suficientemente masculino”.
¿Qué puedes hacer en caso de sentir disforia de género?
Es importante acudir a atención profesional, ya que ahí podrás identificar las causas de tu disforia y te guiarán en el tratamiento más adecuado (psicoterapia, terapia hormonal, cirugías de reasignación, asistir a un grupo de apoyo, etcétera).
Por último, considera que hay personas que, incluso durante su proceso de transición, siguen sintiendo disforia de género; así que contar una buena red de apoyo te ayudará a superar cualquier bajada emocional. ¡No minimices tus sentimientos!