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“Cualquiera que diga que no soy feminista, no me conoce”, autora de “Cincuenta sombras de Grey” se defiende

E. L. James se volvió famosa por su saga que incluye una relación entre una inexperta universitaria y un multimillonario atormentado obsesionado con el sadomasoquismo

La autora asegura que todavía no asimila el éxito que ha logrado con sus libros. Instagram/@Erikaljames
La autora asegura que todavía no asimila el éxito que ha logrado con sus libros. Instagram/@Erikaljames
Por:  Diverso

E. L. James, autora británica de la exitosa saga “Cincuenta sombras de Grey” defendió en entrevista a EFE sus tramas sexuales y de relaciones de poder (donde la mujer pareciera quedar sometida al hombre), con motivo de “La Condesa”, su última novela, afirmando que “las feministas también pueden tener fantasías”.

Erika Leonard Mitchell (su nombre verdadero) confesó hace unos años que proyectó sus propias fantasías en la exitosa trilogía erótica iniciada en 2011 que arrasó en las listas de libros más leídos y que más tarde fue llevada al cine.

A la fecha, la autora londinense todavía no ha digerido del todo ese éxito abrumador, pero es consciente de que le cambió la vida: "Ahora tengo tres casas, y no las tenía antes de "Cincuenta sombras".

“La Condesa”

Tras “Cincuenta sombras” publicó "Mister" (2019) y el pasado 27 de junio estrenó en España (con Penguin Random House) su segunda parte, "La Condesa", editada también en catalán por Rosa dels Vents, parte de la misma editorial.

"Tenía la historia en mi cabeza desde 2009 y estos personajes no me dejaban en paz, así que los quise sacar y lo hice con "Mister" en 2019, pero después la gente no dejaba de preguntarme qué iba a pasar (...) Creo que es la historia más romántica que he escrito hasta ahora", afirma.

E. L. James continúa ahí con el romance entre el personaje de la alta sociedad británica Maxim Trevelyan, conde de Trevethick, y su ex asistente, la albanesa Alessia Demachi que, tras zafarse de las bandas de trata, termina en Londres convertida en condesa.

La autora regresa además a lo que ya es un elemento constante en su literatura: la relación amorosa y sexual entre un varón adinerado e influyente y una mujer vulnerable. 

Al respecto, la escritora admite abiertamente que le "gusta explorar la dinámica de alguien que es excepcionalmente poderoso con alguien que no lo es".

"Lo encuentro fascinante y es algo que me atrae. Lograr que estas dos personas se encuentren me parece interesante", explica.

De hecho, su último libro, "La Condesa", surgió "de la simple idea de qué pasaría si un hombre se enamorara de su limpiadora (...). De ahí empecé a soñar y luego todo fue encajando".

Se considera feminista

Esa tendencia a situar a la protagonista femenina en una posición de inferioridad o vulnerabilidad frente al hombre le ha costado críticas que la acusan de degradar a la mujer.

"Creo que cualquiera que diga que no soy feminista, realmente no me conoce muy bien. Si tienes una mujer joven que seduce a un hombre muy rico y exitoso, esto, creo, es un mensaje muy feminista. Y además, las feministas también tienen fantasías", se justifica.

Para El. L. James, sus libros "añaden un elemento de fantasía y son un escape para que las personas puedan sumergirse en otro mundo". Además, confiesa que "decepcionar a la audiencia" es su "mayor temor" y ese miedo a defraudar al lector se agudiza "especialmente después del éxito fenomenal de 'Cincuenta Sombras de Grey'".

Su vida personal

Casada con el guionista norirlandés Niall Leonard y madre de dos hijos, E. L. James confiesa que "odia" la fama y la atención, pero logra pasar desapercibida gracias a su pseudónimo y a "ser una mujer de mediana edad con sobrepeso y, por lo tanto, invisible (para la sociedad)".

Tampoco es capaz, según admite, de descifrar la clave por la cual consigue que sus historias conecten con audiencias de todo el mundo.

"Realmente no sé cuál es el secreto. Aún sigo pasmada por el éxito de 'Cincuenta sombras' y, en realidad, yo escribo para mí misma y me fascina que a otras mujeres les guste lo que escribo", concluye.

Con información de agencia EFE

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