Desde hace algún tiempo se ha vuelto común el término “inclusión forzada”, el cual pretende definir a aquellas cosas que solamente buscan cumplir con la llamada agenda política (de género) lo cual, aunque intenten aplicarlo a la industria del entretenimiento, no es cierto por estas razones.
El hecho de que hoy en día exista una mayor presencia de personajes LGBTTTIQAP+ en series y películas no responde a una inclusión forzada sino a una necesidad.
En primer lugar, el mundo es diverso, pues sabemos que existe una amplia gama de orientaciones sexuales y expresiones de género. Por tanto, la exclusión de personajes que visibilicen al paraguas LGBT+ perpetúa la invisibilidad y refuerza los estereotipos, prejuicios y discriminación.
Esto, tal vez, puede ser debatido con el hecho de que los medios no reflejan siempre la realidad; pero olvidaríamos que incluso desde la ficción se puede contar con modelos positivos para todas las personas, como las minorías.
Vernos reflejadxs en la pantalla nos ayuda a sentirnos validadxs y empoderadxs, generando más confianza, al tiempo que también se educa a la sociedad, en general, sobre la normalidad.
Ahora bien, si la inclusión de estos personajes va más allá de su identidad u orientación, y también se destacan problemas a los que se enfrentan, pueden generar empatía o reducir la discriminación.
Consideraciones finales
La industria de entretenimiento impacta en la sociedad, por lo que una inclusión de personajes LGBT+ de manera respetuosa contribuye a la construcción de una sociedad más empática.