El día de ayer el Parlamento húngaro aprobó la modificación de una polémica ley que permitía denunciar, de manera anónima, a personas LGBT+ por no compartir los valores tradicionales del Gobierno.
Antecedentes
Katalin Novák, presidenta de Hungría, rechazó en abril firmar la ley aprobada poco antes por la mayoría parlamentaria del Fidesz, el partido del primer ministro, el ultranacionalista Viktor Orbán, y devolvió la legislación al Parlamento para una nueva consideración.
En aquel momento, Novák justificó su rechazo con el argumento de que "los instrumentos de la legislación son discutibles y podrían aumentar la desconfianza hacia miembros de la sociedad".
Nueva enmienda y situación en Hungría para la población LGBT+
Tras la enmienda de hoy, la ley cumplirá su papel original de regular las normas vigentes en la Unión Europea (UE) sobre reclamaciones y denuncias anónimas en casos de corrupción o delitos, entre otros.
Por su parte, el Fidesz, que defiende una visión cristiana y tradicional de la sociedad, aprobó en 2011 una Constitución que define el matrimonio como la unión de un hombre y una mujer.
Sin embargo, en julio de 2022 la Comisión Europea (CE) denunció a Hungría ante el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) por una legislación que prohíbe hablar sobre la orientación sexual en escuelas y medios de comunicación, tildada de homófoba por los críticos de dentro y fuera del país.
De hecho, por esta razón Bruselas mantiene congelada la entrega a Budapest de 22 mil millones de euros en fondos comunitarios mientras no se demuestre que el Gobierno húngaro garantiza que los programas para utilizarlos respetan la Carta europea de Derechos Fundamentales.
Con información de agencia EFE