Los relatos, historias y experiencias compartidas de realidades que muestran la verdad en entornos violentos, machistas LGBTfobicos y más son, aunque crudos, de suma importancia para entender el contexto que atraviesa no solo México sino el resto de Latinoamérica.
Tal es el caso de la reconocida periodista argentina Leila Guerriero, quien, hace uso de las letras y la investigación periodística a través del ahora conocido “periodismo literario o nuevo periodismo”, en este caso con “La llamada”, obra (no ficción) que narra la vida de Silvia Labayru, militante de la insurgencia durante la dictadura quien fue secuestrada, torturada y abusada sexualmente por los militares.
¿De qué va “La llamada” obra de Leila Guerriero?
Esta obra de narrativa periodística, con base en el testimonio de primera mano, a las fuentes documentales y archivísticas, recorre la infancia de Silvia hasta su poster liberamiento de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), lugar clandestino de tortura.
Con una mirada humana y objetiva, Silvia recupera las vivencias de Labayru, en particular su obligada identidad para hacerse pasar como hermana de un activo militar, infiltrado en una organización civil de madres buscadoras; entre finales de 1970 y mediados 1980, miles de personas desaparecieron y fueron muertos a manos del terror de Estado.
En una conversación, la periodista lamenta que los consensos entre la sociedad para reconocer este pasaje oscuro de su historia, para dar luz a la memoria y reiterar la no repetición, son objeto de duras críticas de parte del gobierno del populista libertario Javier Milei, presidente de Argenitan .
Además, tiende un puente entre la experiencia argentina y la mexicana, en el avance de los derechos humanos y los retrocesos, al mismo tiempo, en un clima de violencia donde miles de personas permanecen en calidad de desaparecidos, una tragedia en común pero con voluntades para afronterla distintas.
Con información de SUN.
RSA.