Qué mejor momento para reflexionar sobre el valor del amor en nuestras vidas, que estando a tan solo unos días de San Valentín, en este el mes del amor.
Para Elizabeth Brake, maestra de filosofía en la Universidad de Rice, no todo es bello y feliz, ni este mes, ni el resto del año, pues a raíz de una serie de investigaciones a parejas diversas se dio cuenta de que existe un fenómeno social al que ella llamó amatonormatividad.
Hay sociedades que tienen aún más arraigada la cultura de la amatonormatividad, como es el caso de la cultura asiática, donde tener pareja es símbolo de estatus y te abre puertas laborales y sociales.
¿Qué es la amatonormatividad?
Son una serie de conceptos que dictan las normas del amor y el desarrollo personal, condicionando el valor de una persona además del nivel de felicidad y bienestar a la que esta puede aspirar de acuerdo con sus relaciones interpersonales.
Así pues una persona debe buscar la plenitud en una pareja, el gran logro es encontrar alguien que te ame incondicionalmente y se convierta en tu compañero de vida. Se maneja la premisa de que tener pareja no solo es normal sino necesario, estar soltero al final de nuestros días, no es una opción y que además esta unión deberá ser romántica y monógama.
Entonces es normal escuchar a la gente decir que “está buscando pareja” o el típico pacto con tu amigo de la juventud, que dice que si se llega a cierta edad y todavía no “consiguen” pareja por separado, se casarán el uno con el otro, para no estar solos.
Como si tener pareja y casarse fuera un requerimiento de la vida y no una elección, ¿a caso no tenemos opción?.
Consecuencias de vivir en un mundo amatonormativo
En esta realidad anatomormativa que vivimos, se le da gran peso al amor romántico y se desplazan y/o niegan otras realidades. Si bien toda la población en general sufre las consecuencias de la dictadura del amor, hay grupos poblacionales que se llevan la peor parte, y son los siguientes:
- Personas solteras
Por obvias razones una persona que no tiene intereses románticos las lleva de perder en una sociedad que premia el romance e impulsa a las personas a dejar la soltería a toda costa, como si de un barco en hundimiento se tratara.
Estar soltero o soltera implica que no eres deseable, algo está mal en ti y que vives en soledad.
- Relaciones polígamas
Se piensa que las relaciones monógamas son ideales, pensando en la estructura de la familia tradicional, mamá, papá e hijos es la formula perfecta para alcanzar la dicha y la plenitud según la amatonormatividad.
Por lo que una relación poliamorosa no cumple con los requerimientos para ser una relación estable según dichos preceptos.
- Personas arrománticas
Al no experimentar el amor romántico ni estar de acuerdo con los valores de este, las personas arrománticas están condenadas a fracasar social y amorosamente. Puesto que un arromántico puede o no querer estar en pareja o disfrutar los vínculos profundos interpersonales que el romanticismo demanda.
Señales de que vivimos en la amatonormatividad
- Es vergonzoso aceptar que nunca has tenido sexo o que lo tienes con poca frecuencia
- Si no tienes pareja tus amistades o familia se dan a la tarea de buscarte a alguien para que no estés solo o sola
- Todos los programas de concursos para encontrar el amor que existen
- Si alguna vez tuviste que fingir que tenías pareja para que la gente te dejara de molestar
- Mentir sobre haber dado tu primer beso
- Cuando te sientes incomode con tu soltería aún cuando no deseas estar con alguien
- Mentir sobre el número de parejas amorosas y sexuales que has tenido, para tener aceptación
- Exclusión de personas solteras en eventos sociales
- Los servicios para contratar una cita que te acompañe a algún evento en particular